El Colegio Universitario Central tuvo su tradicional bautismo para estudiantes de primer año y para aquellas personas de otros años que ingresaron a la institución por movilidad estudiantil.
Luego de la semana de convivencia con sus padrinos y madrinas, el armado de ponchos y la "semana del sacrificio", donde adquirieron valores para el posterior bautismo, estudiantes de primer año se convirtieron en Huarpes y Pehuenches, bajo la atenta mirada de sus padres y madres que asistieron a este espectáculo organizado por el Centro de Estudiantes del CUC, Tribus, cuyas autoridades fueron recientemente elegidas mediante la boleta única.
De esta manera, en la institución se vivió una de las tradiciones más arraigadas entre los y las estudiantes pero también entre el personal docente y de apoyo académico.