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Estudiantes costarricenses de intercambio visitan la UNCuyo

Durante once días, alumnos secundarios y docentes de la Universidad Nacional de Cuyo y de la Universidad Nacional de Costa Rica se reúnen para desarrollar y compartir experiencias académicas, culturales y sociales. Lo hacen a través de un proyecto de movilidad que promueve la Secretaría de Políticas Universitarias de la Nación.

imagen Estudiantes costarricenses de intercambio visitan la UNCuyo

Una delegación estudiantil costarricense y chicos del Colegio Universitario Central y de la Escuela de Comercio "Martín Zapata" celebran la concreción, en todas sus fases, del proyecto institucional “Movilidad Estudiantil Argentina-Costarricense”  elaborado para consolidar un espacio de educación preuniversitaria como herramienta de integración latinoamericana.

La apertura fue en el Cicunc, en la oportunidad, la coordinadora del proyecto de movilidad por la UNCuyo, Analía Valera, habló de los distintos procesos que atravesó el proyecto desde los comienzos. Recordó a las personas que trabajaron sobre la idea, hasta hacerla realidad. Y en ese contexto destacó la importancia de realizar este tipo de actividades porque permiten, no sólo, resaltar las competencias de internacionalización de los estudiantes, sino también darles la posibilidad de hermanarse y compartir vínculos de integración académica y cultural entre países que comparten visiones afines, donde la educación pública, es pilar de la sociedad, es inclusiva y gratuita, y potencia la movilidad.

Luego agradeció el apoyo de las familias anfitrionas y aclaró que sin su colaboración no podrían llevar adelante el Programa. Y para cerrar pidió a las autoridades de la Universidad que sigan trabajando por la continuidad del proyecto y por un mayor financiamiento para que la propuesta sea más inclusiva y puedan viajar más chicos.

Por su parte, Perla Cremaschi, directora general de Educación Secundaria de la Universidad, se refirió al proyecto, puso en valor el desarrollo de los programas de intercambio, por las vivencias que experimentan los chicos y por el vínculo de amistad que genera entre los ellos, y resaltó que es un hecho enriquecedor. Y se comprometió a ocuparse de que sea más igualitario y equitativo para que todos los chicos puedan participar. E instó a “seguir trabajando para que estos intercambios cada vez sean más fructíferos, con mayor aprendizaje y para una mayor innovación educativa” concluyó Cremaschi.

Para finalizar, Luis Zuñiga, docente de la Universidad Nacional de Costa Rica, sede Nicoya, habló del lema de su Institución “por una Educación que transforma” comentó que se refiere, fundamentalmente, a trascender fronteras y generar cambios en una era donde la tecnología y la comunicación sobrepasan cualquier rendimiento posible. “Creemos en un mundo sin barreras, sin fronteras, donde todos somos parte de este mundo”, remarcó.

Explicó también que el sistema nacional de los Colegios Humanísticos está llamado a liderar los cambios con una educación diferente inspirada en una visión humanista con un fuerte impacto social que, día a día, pueda contribuir a lograr mejores estudiantes, personas y ciudadanos, concluyó.

Luego, chicos costarricenses agradecieron la posibilidad de estar en Mendoza y hablaron de sus experiencias personales y sus visiones respecto de esta oferta de movilidad, recibieron y entregaron obsequios y al finalizar, estudiantes, docentes  y autoridades, de ambas Casas de Estuido, compartieron bailes y música.

Sobre el programa

A través del Programa de Movilidad que promueve la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, estudiantes y docentes realizan una estadía de, entre 10 y 15 días, en ambos países, para intercambiar experiencias académicas, culturales y sociales.

Las actividades académicas consisten en cursar la oferta de los colegios de cada país, según la orientación que los alumnos elijan. Y también desarrollar actividades como conversatorios, charlas, entre otras.

En cuanto a lo cultural, los estudiantes hacen visitas a diferentes instituciones públicas y privadas para conocer las costumbres de la sociedad y también sus tradiciones. En tanto que en lo social, comparten diferentes propuestas que ofrecen las familias anfitrionas.

Se trata de una posibilidad que permite conocer e  incorporar otras culturas,  con sus usos, costumbres, valores y  normas. Además de acceder a otras formas de enseñar y de aprender, a otros contenidos y modos de producción y de organización. Como así también, promover en los estudiantes la idea de ser ciudadanos del mundo impulsados por valores universales con respeto por la propia identidad nacional y la diversidad cultural.

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