Renzo Guiñazú, quien falleció en la madrugada del lunes, fue despedido por sus compañeros y compañeras de 4to Ciencias Naturales A del CUC con un mensaje al cielo. 

Durante el acto estuvieron presentes sus papás Víctor y Silvina, junto a su hermana Ariadna, quienes escucharon emocionados la carta que escribieron sus amigos para recordar a su hijo y hermano, respectivamente. 

En tanto, el SOE compartió en horas de la mañana con los estudiantes de 4to CNA, su preceptor Daniel Aldao y docentes un espacio de escucha y diálogo que quedó abierto para quienes lo necesiten. 

Compartimos la carta con el resto de la comunidad cuquera:

Hoy escribimos estas líneas con un profundo dolor en nuestros corazones, pero también con una gran gratitud por haber tenido la dicha de conocerte y compartir momentos con vos. Aunque te has ido físicamente, tu espíritu vivirá siempre en nuestros corazones y tus enseñanzas nos acompañarán a lo largo de nuestras vidas.
 
Es difícil encontrar las palabras adecuadas para expresar la tristeza y el vacío que sentimos. Tu partida dejó un vacío profundo en nuestras vidas y en el corazón de todos aquellos que tuvimos el privilegio de conocerte y compartir momentos especiales con vos..
 
Tu valentía y determinación en esta batalla fueron un ejemplo de fortaleza y coraje para todos nosotros. A pesar de los desafíos y las dificultades que enfrentaste, nunca perdiste tu espíritu luchador ni tu optimismo.
 
Recordamos con cariño todos los momentos compartidos: las risas, las conversaciones sinceras y los gestos de bondad que mostrabas hacia los demás. Siempre fuiste alguien generoso, dispuesto a brindar una palabra de aliento, una mano amiga o un hombro en el que apoyarse.
 
Tu legado perdurará en aquellos a quienes tocaste con tu presencia. Tu ejemplo de vida nos enseña la importancia de vivir cada día plenamente, de amar incondicionalmente y de valorar los momentos que compartimos con nuestros seres queridos. Tu determinación en la lucha nos inspira a seguir adelante, a no rendirnos y a encontrar fuerzas incluso en los momentos más difíciles.
 
Aunque ya no estés físicamente con nosotros, sabemos que siempre estarás presente en nuestras vidas.
 
Hoy te decimos adiós con el corazón cargado de tristeza, pero también con la certeza de que tu espíritu vivirá eternamente. Descansa en paz, querido Renzo. Siempre estarás en nuestros corazones.
 
Con cariño y eterno amor.