A partir de un informe elaborado por Sergio Saracco, médico emergentólogo de la Universidad Nacional de Cuyo es que enviamos una serie de recomendaciones sobre el lavado de manos.
Para empezar, el especialista advirtió que el alcohol en gel es solamente una de las alternativas para higienizarse las manos.
"Lavarse las manos con agua y jabón frecuentemente es igualmente efectivo. También se puede utilizar alcohol diluido en agua (7 partes de alcohol por cada 3 partes de agua). Si bien el alcohol en gel proporciona mayor confiabilidad a las personas sobre la calidad de la antisepsia en sus manos, no debe abandonarse la técnica del lavado de manos como técnica base en la practica diaria", advirtió el especialista.
Además, aseguró que un gran porcentaje de las infecciones como hepatitis, tifoideas y diarreas, además de enfermedades respiratorias, como la influenza, se trasmiten a través de manos contaminadas.
"El lavado de manos es un hábito que se forma tanto en la casa como en el colegio, y el ejemplo es la mejor herramienta para inculcarlo. Antes y después de comer, y antes y después de ir al baño, son los momentos para practicarlo. Esto debe ser normal como lavarse los dientes. Es un hábito higiénico adecuado y de gran importancia", expuso el profesional quien además es experto en toxicología.
Saracco explicó que en la vida cotidiana, las personas deben utilizar agua y cualquier jabón y saber que las bacterias se barren pero no se mueren. De todas formas, el alcohol gel sí mata las bacterias, pero, si bien no requiere de agua, no limpia ni saca la mugre.
Resfríos y otros virus
"Cuando estornudamos y nos tapamos la boca o nos sonamos, inmediatamente quedamos con las manos contaminadas, por lo que el lavado de manos es fundamental para detener la propagación de resfríos e influenza en nuestro entorno. Además, es importante destacar que hay virus que permanecen en materiales inertes como es el caso de gripe. Estos se quedan por horas en los juguetes o en las mesas", reveló Saracco.
El lavado de manos con agua y jabón en siete pasos:
- El agua y el jabón remueven la suciedad de las manos. Por lo tanto, éste es el mejor método cuando las manos están visiblemente sucias.
- Abrir la llave y humedecer las manos.
- Aplicar jabón.
- Frotar las manos.
- Cubrir completamente las manos con jabón. Lavarlas durante 10 a 15 segundos por todas sus caras.
- Enjuagarlas con abundante agua.
- Secar las manos con una toalla de papel.
- Botar la toalla de papel en el recipiente de residuos.
Lavado con alcohol gel
La solución alcohólica elimina los microorganismos de las manos. Éste es el mejor método cuando las manos están visiblemente limpias:
- Aplicar abundante cantidad de solución alcohólica sobre sus manos.
- Distribuir la solución alcohólica frotando enérgicamente por toda la superficie de las manos.
- Extender la solución alcohólica entre los dedos y la palma de la mano.
- Friccionar las yemas de los dedos.
- Frotar ambos pulgares.
- Finalizar el lavado de manos refregando las superficies de las manos hasta que
- se encuentre secas.
Técnica de lavado de manos que recomienda la Organización Mundial de la salud:
- Duración del lavado, entre 40 y 60 segundos.
- Mojarse las manos con agua tibia – que remueve mejor las bacterias -, y aplicar suficiente jabón para cubrir todas las superficies de las manos.
- Frótese las palmas de las manos entre sí.
- Frótese la palma de la mano derecha contra el dorso de la mano izquierda, entrelazando los dedos y viceversa.
- Frótese las palmas de las manos entre sí, con los dedos entrelazados.
- Frótese el dorso de los dedos de una mano contra la palma de la otra, manteniendo unidos los dedos.
- Rodeando el pulgar izquierdo con la palma de la mano derecha, fróteselo con un
- movimiento de rotación y viceversa.
- Frótese la punta de los dedos de la mano derecha contra la palma de la mano izquierda, haciendo un movimiento de rotación, y viceversa.
- Enjuáguese las manos. Séqueselas con una toalla, en lo posible descartable. Utilice la toalla para cerrar el grifo.
Sus manos ahora son seguras.
