La gran apuesta de Tribus fue reafirmar el sentindo estricto del "Baustismo", ese mismo que nació en la década del 70 y hoy es cada vez más mágico, más sagrado. Más exótico. Una vez más se buscó fortalecer el lazo de unión entre padrinos (alumnos egresados) y ahijados (alumnos de primer año), la escencia de las TRIBUS, su historia, su significado.
Los alumnos de primero año ingresaron al colegio alrededor de las 11 y ya comenzaron a sentir ese cosquilleo de incertidumbre. Luego de realizar diversos juegos en sus respectivos cursos, fueron trasladados al salón de actos "Irma Suárez", lugar donde presenciaron una producción audiovisual y una representación por parte de TRIBUS.
Luego, llegó el turno del rito tradicional y estallaron miles de corazones.